Casa la Rosa

Mucha amabilidad y disposición por parte del anfitrión, la habitación pequeña pero acogedora, y el baño es grande, con sus albornoces y todo. Está en una pequeña aldea tranquila y muy cerca de Almedinilla, nuestra parada de visita para el día siguiente y el precio de la habitación bastante económica con el desayuno incluido. Puedes aparcar cerca en unos espacios entre las casas. Esa noche fue una de la más fría y aunque la estufa que tiene no calienta del todo la habitación, el plumón de la cama hizo su trabajo. Tiene una tv que va por Smart, pero no tuvimos necesidad de usarla, ya que prácticamente solo pasamos la noche. Cuenta con una terraza o patio elevado y por la noche puedes ver las estrellas fugaces (en época), no está oscuro del todo, pero se llegan a ver bien, además de tener una piscina de estas montables para el verano. Para el desayuno incluido te pregunta a que hora te lo prepara y en nuestro caso nos hizo unas tostadas. Tanto a la entrada como a la salida nos ayudó con las maletas. Yo repetiría