Gandia Playa

Una de las cosas a destacar del hotel es la excelente amabilidad de absolutamente todo el personal. Muy atentos a las necesidades de los clientes. La situación también es muy buena aunque, como ya han dicho en otras opiniones, parece más un bloque de apartamentos familiares más que un hotel. Hay mucha gente que no sabe comportarse y aunque esto, obviamente, no es culpa del hotel, tampoco se ponen medidas al respecto. La gente saca comida del restaurante de una manera totalmente desproporcionada. Traen incluso botellas de fuera para llevarse agua a la habitación ya que lo rellenan en el mismo restaurante en un grifo que hay con agua fresca. Las almohadas son un horror. Las puertas de las terrazas en las dos habitaciones que nos alojamos no funcionaban y tardaron tres días en poder solucionarlo por lo que tuvimos que dormir con las puertas de la terraza abiertas. La comida del buffet del hotel es muy repetitiva además de estar fría puesto que la temperatura del recinto es bajísima debido a la potencia del aire acondicionado. El tema de las mascotas ya llega a otro nivel. Perros por todos los lados. Entendemos que el hotel sea pet friendy pero en muchos casos es bastante difícil dormir con los gemidos y ladridos de los perros en absolutamente todos los lados. No a todo el mundo, aunque le gusten las mascotas, les agrada que un perros se te suban encima o te chupen cuando va subiendo en un ascensor teniendo que aguantar la excusa del dueño de que te está saludando, por lo que se agradecería que pusieran algún tipo de indicación como la obligatoriedad de llevar bozal en zonas comunes o la más mínima norma al respecto. Es frustrante no tener sitio para sentarte en la silla de la piscina porque hay perros subidos encima, más que pet friendly el hotel parece human friendly en el cual los humanos también somos admitidos a convivir con los animales en este hotel. Pese a todo, simplemente por la amabilidad del personal del hotel y la situación del mismo repetiría sin dudarlo.

No suelo poner reseñas pero el personal del hotel se lo merece. Gracias por ser tan amables y atentos. Sois encantadores. Tanto el personal de recepción como en comedor y actividades para los pequeños. El hotel sencillo pero con todo lo necesario y perfecto en ubicación

Hola he estado desde 31 de mayo al 3 de junio dicho hotel esta muy bien la habitacion con una terraza vista a la playa el cuarto de baño un poco estrecho pero limpio colgaba las toalla para reutilisarla pero me ponian otras limpia la cama muy comoda la almoada un poco dura, sobre el comedor bien organisado las comida normal estaban buena y el personal del servicio muy profecional lo que no me gusto fue la entrada hay que subir unos escalones con las maletas le hace falta una rampa

He estado alojada en muchísimos hoteles pero jamás había estado en un hotel como este. Es cierto que el precio que incluye alojamiento y pensión completa es bastante asequible pero al final lo pagas caro. En primer lugar el personal en recepción es maleducado, imprudente y sin modales en su trato con el cliente. La organización del hotel es pésima, se ve en el hecho de que cierta información que dejas a la hora de hacer la reserva como el hecho de llevar un perro no la apuntan y el personal de limpieza no tiene constancia de ello. A nosotros nos pasó que les comunicábamos que llevaríamos a nuestro perrito y al día siguiente fuimos a darle un paseo mientras nos limpiaban la habitación y a la 1 de la tarde la habitación seguía sin hacer, con lo cual toda la primera mañana de playa la perdimos dando vueltas por Gandía con nuestro perro. Lo hablamos con el personal de limpieza y ni siquiera tenían anotado que en nuestra habitación había un perrito. Decidimos no quejarnos a recepción porque pensamos que al día siguiente estaría resuelto el problema pero ese mismo dia a la hora de hacer cola para entrar a cenar la chica de recepción nos llamó la atención delante de todo el mundo y de muy malas maneras asegurando que por la mañana la chica de la limpieza se habia asustado al entrar en la habitación porque "casi" se escapa el perro del hotel (cuando llevaba toda la mañana con nosotros y al perro lo dejamos en la habitación una vez hicieron la limpieza) y que nuestra obligacion era avisar al hotel. Cuando le enseñamos nuestro mensaje de la reserva en la que se decía de forma explícita que llevamos perro la chica reconoció que había exagerado lo del perro para que la gente se diese cuenta de la importancia de avisar, pero que era un poco "en plan broma". Le dije que eso no era una broma, era una mentira y que ese trato estando de cara al público me parecía lamentable. Cuando se dio cuenta de que lo había hecho ella mal porque se había equivocado por completo en sus acusaciones pidió perdón pero en los días que nos quedaron en el hotel no volvió a saludarnos cada vez que pasábamos por recepción. Para mí gusto si actitud fue atrevida, ofensiva y totalmente grosero. Lo peor es que las otras chicas solían tener la misma actitud, lo cual me parece una verdadera vergüenza. A la hora de las comidas en vez de hacer turnos para organizar la cantidad de gente que había, todo el mundo iba al mismo tiempo y tardabas un horror en poder acceder a una mesa. El buffet estaba tan masificado que te costaba horrores llegar a coger comida. Los camareros tenian mucha prisa por recoger la mesa y en dos ocasiones cuando fuimos a por más comida nos quitaron las cosas de la mesa incluido el mantel, incluso dejando comida en el plato y vasos con bebida... Lo curioso es que lo hacían de forma habitual y la gente tenía que estar muy alerta para que no recogieran sus cosas. A su vez, la comida no estaba nada buena y hubo varios casos de gente con problemas de estómago tales como

Hotel familiar,de los pocos que existen que tus mascotas se encuentren como en casa, camas y almohadas comodísimas, personal super atento, tanto recepción,como camareros , limpieza exquisita,comida buena y destacar los espectáculos nocturnos de magia y música, gracias a Sánchez y Nora nos lo pasamos genial.

Fuimos 6 días en agosto, 5 adultos y dos niños menores de 5 años. En recepción nos recibieron muy bien, nos aconsejaron sobre dónde ir, que visitar, donde tomar algo... Teníamos una habitación triple y una cuádruple, la triple un poco pequeña, la cuádruple muy bien, espaciosa, camas cómodas, un baño estupendo, armario y cajoneras para la ropa. La comida aceptable, pero no muy buena. El personal en comedor rápido y eficaz, las metres muy bien, no hay turnos, y gestionan muy bien las mesas. Hay tronas y sillas altas para los niñ@s. Hay dos piscinas, las dos de buen tamaño, lo malo que el suelo es muy resbaladizo y que la piscina de los pequeños da a la entrada, es decir, se pueden salir a la calle. Otra cosa negativa es que en los pasillos y los ascensores hace muchísimo calor, y además son muy lentos. Lo que menos nos ha gustado, y creo que deberían hacer algo es con la entrada al hotel, son muchas escaleras y no hay rampa, el acceso con maletas, carros de bebé,y sillas de ruedas o muletas se hace muy difícil. Lo que más, hay muchas actividades para niñ@s,y música en directo por la noche.