El Muelle by Dot Boutique

Tuve una estadía de 3 días en este hotel y la experiencia fue excelente. El lugar es muy grato y cómodo, con habitaciones cálidas y una vista maravillosa. El acceso es fácil y el descanso fue realmente confortable. La piscina es hermosa y tiene una vista espectacular al lago, lo que la hace aún más especial. También solicité el servicio de masajes y fue una experiencia totalmente recomendable, muy profesional y relajante. El personal fue siempre muy amable y atento, lo que hizo que la estadía fuera aún más agradable. Particularmente voy a destacar la buena predisposición de Miriam. El desayuno es muy completo y disfrutarlo con vista al lago fue un gran plus. Sin duda volvería y lo recomiendo completamente para quienes buscan descanso, buena atención y un entorno encantador.

La ubicación, vista, tranquilidad, limpieza y atención es para 5 puntos Solo le resto 1 punto porque el TV no es acorde al hotel, no se puede ver bien por la calidad de señal h sobre todo NO es smart para que uno puede ver una serie El resto EXCELENTE!

Lamentablemente, nuestra experiencia en "El Muelle" no cumplió con nuestras expectativas. Desde nuestra llegada, notamos una falta de flexibilidad en la atención. Aunque el check-in estaba programado para las 15:00 hs y faltaba solo una hora, el personal no quiso verificar si la habitación ya estaba lista para entregarla antes, a pesar de que se encontraba disponible. Al recibir la habitación, tuvimos que solicitar un cambio debido a un fuerte olor a humedad que la hacía inhabitable. La causa era evidente: una pared con humedad había sido cubierta de manera deficiente con placas de yeso, sin solucionar el problema. Estas placas estaban mal colocadas, con manchas y agujeros tapados con adhesivos. Además, el mobiliario se encontraba en mal estado de conservación y el televisor era un modelo antiguo, de más de 15 años, lo que en conjunto no correspondía con la categoría de un hotel de 4 estrellas ni con los estándares de la cadena. Las áreas comunes también mostraban signos de abandono. Los decks de madera estaban despintados y en mal estado, y el área de la piscina parecía directamente descuidada. Ante nuestro reclamo, nos ofrecieron una solución poco conveniente: trasladarnos temporalmente a otra habitación por un día y luego cambiarnos nuevamente. Como alternativa, propusimos que nos reubicaran directamente en Huenu, un complejo cercano administrado por la misma cadena, donde en anteriores ocasiones habíamos tenido una buena experiencia. Afortunadamente, el personal de recepción, que fue muy amable y considerado, gestionó este cambio de manera rápida y eficiente. Elegimos este hotel confiando en el sello DOT, que en otras ciudades nos ha garantizado ciertos estándares de calidad y servicio. Sin embargo, en este caso, la experiencia no estuvo a la altura. Es evidente la falta de inversión y mantenimiento, lo que nos impide recomendarlo, especialmente a quienes buscan un servicio de calidad para disfrutar de sus merecidas vacaciones. Aguardamos el contacto del hotel para ofrecer una compensación por la diferencia de precio, ya que la nueva ubicación, si bien es agradable, tiene un costo inferior. Esperamos que estas observaciones sean tomadas en cuenta para mejorar el servicio y que se nos brinden las disculpas correspondientes. Atentamente, Marcelo