Decameron Las Heliconias - All Inclusive

Deberían avisar q no todos los servicios e instalaciones están trabajando

Las instalaciones del hotel son bonitas,es indudable, pero la atención pésima es un Hotel todo incluido donde nada se puede. Tiene dos restaurantes uno con reserva fui a reservar y no se podía solo a las 7 am a través de un código QR que solo está en la recepción, segundo día llegué a las 8am y supuestamente ya no se podía según ellos todo lleno, en temporada baja, y el hotel desocupado, luego quise ir a conocer el otro hotel el de panaca así promocionan dijeron q el bus salia a las 10 am llegué faltando 10 minutos y no se podía el bus ya se había ido, supuestamente lleno, en el mismo hotel me dijeron q cruzará la calle y tomara un bus de servicio publico que me dejaba en panaca pagando, antes de salir del hotel quise reservar el spa para 2 personas y que creen, no sé podía solo el domingo de a una persona y la otra esperando 50 minutos, aún así lo hice, llegamos a panaca y queríamos tomar el almuerzo y que creen no se podía tampoco que había que hacer reserva, situación que nunca nos dijeron, allá si pudimos tomar el spa las dos personas, fue lo único que pudimos hacer, regresamos a heliconias fuimos almorzar a las 2 pm y que creen no se podía ya no había almuerzo, fuimos a los snacks y lo único que habían eran papás mal servidas pero bueno era cuestión de hambre pedí un jugo y en unos vasos de papel pequeñitos estilo tinto me sirvieron medio vaso de jugo según ellos ya no había, quise pedir un helado y otra vez no se podía que solo en el almuerzo que en ninguno de los dos hoteles me quisieron dar. Ya molesta me queje llamaron a la supervisora y luego de escucharme me dijo que era mi culpa por no quejarme, esa la respuesta de un funcionario, en fin pidió que me dieran algo de comer y 20 minutos después me llevaron una granadilla y un pedazo de papaya, habló con el capitán que para que me incluyeran en su larga lista de comensales y lo digo con ironía, fuimos al restaurante fonda donde es con reserva y medio restaurante estaba solo se acercaba la gente a comer allí y no los atendían la respuesta que no habían hecho la reserva, es decir tienen el restaurante desocupado y prefieren dejarlo así y no atender a nadie, la comida que decir bastante común para tanta historia de reserva. Las meseras me dió lastima la verdad una puso la carta sobre la mesa y rompió la copa volaban vidrios por todas partes otra no sabía ni pronunciar los platos, no quiero hablar mal de ellas hablo de mala preparación del hotel, se nota que ni capacitan sus funcionarios. El remate la salida Erika en la recepción funcionaria déspota, cero amable me trató como si no hubiera pagado creyéndose la dueña del hotel y contestando como si la gente saliera debiendo. Lo único amable el botones un señor de edad y el conductor de un carro de nombre Carlos. Un hotel todo incluido que nada que ver, se nota la mala atención de todos, la falta de capacitación, el cero servicio al turista, venden algo que no existe un servicio todo incluido que deberían llamarlo nada incluido. Lo más tris

Un hermoso hotel que se mimetiza armoniosamente con el paisaje: casonas de techos altos, maderas coloridas, largos corredores que juegan con la luz y las plantaciones quindianas de café; Allí la tranquilidad, el paisaje, la atención y la tibieza del clima perfecto permiten una temporada perfecta. Las habitaciones aunque ligeramente oscuras, son cómodas, acogedoras e impecables con un servicio diario excelente. Un muy buen hotel en medio de un paraíso. Sus cafés de tarde son deliciosos.