Hotel Can Batiste

Hotel céntrico en Sant Carles de la Ràpita, muy buen servicio y todo muy limpio, el desayuno muy bueno y la comida del restaurante también espectacular. Por poner algo negativo la habitación nos tocó en calle principal y hay un poco de ruido por el tránsito. Por suerte el aire acondicionado te salva bastante.

Hotel familiar con pocas habitaciones, bien situado en la salida del pueblo y cerca del mar. En nuestro caso, nos dieron una habitación doble MUY pequeña y estrecha, con detalles que la hacían incómoda. Baño sin colgadores, vistas a zona interior poco discreta, minibar debajo de la mesa (si quieres trabajar tienes que moverlo), cama de 1,50... Además, no es un hotel silencioso. Oyes a los dueños que viven en el tercer piso y, si te toca una habitación al lado del ascensor, escuchas a todas horas las puertas como se abren y se cierran. El desayuno muy mejorable... zumo de bote, poca variedad de dulce (el primer día "tocó" donut y el segundo mini-croissant de chocolate), 1 panecillo y tomates para el embutido, huevos hervidos, y poco más. Tenía muy buen recuerdo de este hotel de hacía años y, aunque el precio es correcto, ha ido a peor en todos los sentidos y no compensa.

Hotel parfaitement situé, à deux pas de la plage et du centre ville. Parking gratuit facile devant l'établissement. Accueil sympathique en français. Chambre à la décoration sobre, assez spacieuse, bonne literie, climatisation très silencieuse et pourtant très efficace, beaucoup de place dans le petit réfrigérateur, tout est parfaitement propre. Le petit déjeuner est délicieux. Très bon rapport prestations/prix.

Hotel muy recomendable. Habitación amplia. Servicio de habitaciones diario y desayuno variado con productos de calidad. El hotel está en una zona tranquila y cerca de la playa. Al centro y puerto del pueblo se puede ir caminando (15 minutos aprox). Merece la pena probar el restaurante; de diez.

A destacar el excelente servicio de habitaciones: limpieza exquisita y buena provisión diaria de amenities. Buen servicio de desayunos. Hotel tranquilo y bien situado. Nos han recomendado el servicio de restaurante para las cenas. La próxima vez que vayamos haremos uso de él.

La chambre est confortable et propre, desservie par un ascenseur. Le petit déjeuner est restreint mais correct. Si l'on rajoute le prix du parking privé (il n'y a pas toujours de la place devant), on arrive à un tarif assez élevé, surtout si l'on considère l'environnement qui n'a rien d'agréable. Je mets tout de même quatre car le personnel est agréable, mais c'est plutôt un hôtel d'étape.