Hotel Rústico Lugar do Cotariño

Estuvimos alojados 10 días en agosto en el Hotel Rústico Lugar de Cotariño y no podríamos haber elegido mejor. El hotel se encuentra en un entorno privilegiado de Camariñas, perfecto para desconectar y disfrutar de la Costa da Morte. Lo que más nos sorprendió fue el silencio y la tranquilidad del lugar, junto con una decoración rústica con mucho encanto y una limpieza impecable en todos los espacios. Los desayunos fueron otro de los grandes puntos fuertes: variados, de gran calidad y siempre con el cuidado de Aida, pendiente de que no nos faltara de nada. Además, el trato cercano y atento de “los Albertos” (padre e hijo) hizo que nos sintiéramos como en casa. Sus recomendaciones de lugares para visitar y restaurantes en la zona fueron todo un acierto. En definitiva, un hotel con alma, ideal para relajarse, desconectar y vivir la auténtica esencia de esta parte tan especial de Galicia. Sin duda, ¡volveremos!

Hemos estado el último fin de semana de junio en el Hotel Rústico Lugar Do Cotariño, un lugar precioso en el que se respira calma en todo el entorno. Hemos hecho una etapa de la Ruta de los Faros y el hotel está muy bien ubicado pues se puede salir a pie sin necesidad de utilizar el coche, se encuentra muy cerca del mar, aunque no lo parezca. El cuidado y esmero de la casa y de la habitación donde nos alojamos es estupendo. Cama y almohadas muy cómodas y la limpieza impecable. Un buen desayuno en un comedor o en una galería muy agradables .Todo esto que acabamos de mencionar solo es posible con la dedicación y el cariño hacia lo que se hace. La atención de Alberto fue muy buena desde nuestra llegada hasta el final de la estancia. Hemos de agradecer el detalle que ha tenido con nosotros cuando le preguntamos de un lugar donde poder coger unos bocadillos para la ruta, diciéndonos que ellos mismos podrían hacerlos. Que pongan las cosas tan fáciles es de agradecer. Muchas gracias, seguid haciéndolo así de bien. Es un lugar precioso y recomendable. Nosotros, sin duda, repetiremos.

What a delightful host and accommodation! Alberto is an exceptional host - knowledgeable about the area,local activities, and history, and goes above and beyond professionally to make guests feel welcome and comfortable. In addition, the breakfasts he prepares are gastronomically splendid and satisfying for long adventures exploring the beautiful region. The property is stunning - rustic, yet refined and beautifully decorated to balance the historical significance with modern touches. The property is impeccably cared for and close to restaurants and coastal walking. Thank you Alberto for your gracious hospitality! We look forward to a return visit in the future!